Existen plantas que no requieren nada de luz y que sobreviven con apenas luz y agua; es decir, son especies ideales para cultivar en territorios hostiles en los que otras especies simplemente no sobreviven.
Sansevieria
La sansevieria o lengua de suegra es la estrella de esta fiesta, pues es una planta muy resistente que apenas nos pide unos pocos cuidados. Su aporte estético no tiene parangón si se compara con sus necesidades. Aunque le encanta el pleno sol, no es exigente en este sentido y se adapta estupendamente a vivir en zonas oscuras.
Joya de Zanzíbar
La Joya de Zanzíbar o Zamioculca (Zamioculcas zamiifolia) es una planta de carnosas hojas verdes que resulta ideal para apartamentos, pues no necesita apenas iluminación y se acostumbra muy bien a los ambientes interiores. Crece despacio, es resistente y necesita pocos cuidados, además de zafarse bien de las plagas.
Potos
El potos es perfecto para situarse en zonas altas y dejar caer en cascada sus hojas. Este árbol sobrevive bien en rincones elevados no especialmente iluminados y además nos premia con sus bonitas hojas posándose cómodamente sobre cualquier mueble.
Cintas
Del mismo modo, las cintas son plantas que reciben con los brazos abiertos la luz, pero que viven cómodamente sin ella, sin importarles demasiado para seguir produciendo sus abundantes cintas y tiras que también decoran en cascada.
Aloe vera
Aunque tiene fama de planta totalmente desértica y que necesita el pleno sol para sobrevivir, el aloe vera es, curiosamente, una de las plantas que mejor tolera la vida con poca luz (al menos una hora diaria). Además, son ideales para personas con poca regularidad en el riego.
Filodrendro
El Filodendro debe colocarse, a priori, en un lugar luminoso pero sin rayos de sol directos, pero como el resto de especies reseñadas, no va a poner mala cara si se sitúa en un ambiente poco luminoso. Eso sí, el riego no lo perdona y pide, además, un poco de humedad sobre sus hojas en la época más calurosa.
Spathiphyllum
Originario de México, el Spathiphyllum es una planta perenne de grandes hojas que requiere de la humedad típica del clima del que es originario, pero que no es estricta con la luz que recibe. Es ideal para pisos y apartamentos con orientaciones sombrías.
Crasas
Finalmente, las crasas no podían no ser invitadas a esta fiesta de plantas que resisten lo que les echen: tienen escasas necesidades de riego y de luz y lo realmente milagroso es que se mueran, pues tienen una increíble capacidad para sobrevivir por sí mismas.